El gazpacho es una de las sopas frías más populares y tradicionales de la gastronomía española, especialmente en las regiones del sur, como Andalucía o Extremadura. Se trata de un plato sencillo, saludable y refrescante, que se elabora con tomate, pepino, pimiento, ajo, pan, aceite de oliva, vinagre y sal. Se suele servir frío o a temperatura ambiente, y se puede acompañar con tropezones de los mismos ingredientes o con huevo duro y jamón.
El gazpacho es un plato muy versátil, que admite muchas variaciones según los gustos y los productos de temporada. Además de ser una forma de aprovechar las frutas y verduras que tenemos en casa, versionar el gazpacho nos permite innovar y sorprender a nuestros invitados con sabores diferentes y originales. En este artículo te proponemos 5 formas de versionar el gazpacho para salirte de la receta de siempre, pero puedes experimentar con otras combinaciones que te apetezcan. Lo único que debes tener en cuenta es que mantengas la base de aceite de oliva, vinagre y sal, que le dan el toque característico al gazpacho.
Gazpacho de sandía
La sandía es una fruta muy refrescante y jugosa, que combina muy bien con el tomate y le aporta al gazpacho un toque dulce y aromático. Para hacer esta versión, solo tienes que sustituir parte del tomate por sandía (sin pepitas) y triturar todos los ingredientes hasta obtener una textura homogénea. Puedes ajustar la cantidad de sandía según tu preferencia, pero te recomendamos que no supere el 50% del total. Para decorar el gazpacho, puedes cortar unos trocitos de sandía y unas hojas de menta fresca, que le darán un contraste de color y sabor.
Gazpacho de remolacha
La remolacha es una verdura que tiene un color morado intenso y un sabor ligeramente terroso, que le da al gazpacho un aspecto y un sabor muy distintos al tradicional. Para hacer esta versión, solo tienes que añadir remolacha cocida al gazpacho clásico y triturar todo junto hasta obtener una crema lisa. Puedes usar remolacha fresca o envasada, pero ten en cuenta que esta última suele llevar azúcar añadido, lo que puede alterar el sabor del gazpacho. Para acompañar el gazpacho, puedes poner unos trozos de queso fresco y unas nueces picadas, que le darán un toque cremoso y crujiente.
Gazpacho de cerezas
Las cerezas son unas frutas deliciosas y muy beneficiosas para la salud, que le dan al gazpacho un sabor frutal y original. Para hacer esta versión, solo tienes que mezclar cerezas deshuesadas con el resto de los ingredientes del gazpacho tradicional y triturar todo hasta obtener una sopa suave. Puedes usar cerezas frescas o congeladas, pero te aconsejamos que las laves bien antes de usarlas. Para servir el gazpacho, puedes poner unas cerezas enteras y unas hojas de albahaca fresca, que le darán un aroma y un color muy atractivos.
Gazpacho de aguacate
El aguacate es una fruta muy nutritiva y versátil, que le da al gazpacho una textura suave y cremosa. Para hacer esta versión, solo tienes que incorporar aguacate maduro al gazpacho clásico y batir todo hasta obtener una crema espesa. Puedes usar la cantidad de aguacate que quieras, pero te sugerimos que no sea más del 25% del total. Para darle más sabor al gazpacho, puedes espolvorearlo con pimentón dulce o picante y poner unos trozos de aguacate por encima.
Gazpacho de mango
El mango es una fruta tropical muy dulce y aromática, que le da al gazpacho un toque exótico y diferente. Para hacer esta versión, solo tienes que cambiar el tomate por mango maduro y triturar todos los ingredientes hasta obtener una sopa ligera. Puedes usar mango fresco o congelado, pero te recomendamos que lo peles y lo trocees antes de usarlo. Para decorar el gazpacho, puedes poner coco rallado y unas gotas de lima, que le darán un sabor y un aspecto muy refrescantes.
Estas son solo algunas ideas para versionar el gazpacho, pero puedes probar con otras frutas o verduras que te gusten, como melón, fresa, zanahoria, calabacín, etc. Lo importante es que disfrutes de esta sopa fría tan rica y variada, que te ayudará a hidratarte y a nutrirte en los días de calor. ¡Buen provecho!
